Con gran gozo y gratitud queremos compartir con ustedes la bendición que significó para nuestra congregación la visita de nuestro querido hermano Lorenzo Luévano. Durante su estadía en Manizales, el hermano Lorenzo nos edificó con su sabiduría y dedicación al servicio del Señor, dejándonos profundas enseñanzas y momentos de comunión inolvidables.
Visitas a los Hogares
El hermano Lorenzo dedicó tiempo para visitar a algunos hermanos en sus hogares. Estas visitas no solo fortalecieron nuestra fe, sino que también nos recordaron la importancia de la unidad y el apoyo mutuo en la vida como cristianos. Compartimos momentos de oración, reflexión y alabanza, sintiendo la presencia de Dios en cada encuentro.
Enseñanzas Sobre la Doctrina de la Sustitución
Durante su tiempo con nosotros, el hermano Lorenzo nos impartió una serie de enseñanzas cruciales sobre la doctrina de la sustitución, aclarando por qué es considerada una herejía dentro de nuestra fe. Nos guio a través de las Escrituras, mostrándonos cómo discernir la verdad y rechazar las falsas doctrinas que intentan desviarnos del camino correcto. Su claridad y profundidad en la explicación fueron de gran ayuda para todos nosotros, reafirmando nuestra comprensión de la verdadera doctrina bíblica.
Sesión de Preguntas y Respuestas
Uno de los momentos más enriquecedores de la visita fue la sesión de preguntas y respuestas a la luz de la Biblia. El hermano Lorenzo se tomó el tiempo para responder nuestras inquietudes, proporcionándonos perspectivas basadas en las Escrituras y ayudándonos a encontrar respuestas a las preguntas que a menudo nos enfrentamos en nuestra vida diaria. Su paciencia y conocimiento nos inspiraron a continuar creciendo y aprendiendo en nuestro caminar con el Señor.
La visita del hermano Lorenzo Luévano fue una manifestación clara del amor y la gracia de Dios para con nosotros. Nos sentimos fortalecidos y renovados en nuestra fe, y agradecemos profundamente a Dios por la oportunidad de haber recibido estas valiosas enseñanzas y momentos de comunión.
Que el Señor continúe bendiciendo y guiando a nuestro hermano Lorenzo en su ministerio, y que nosotros podamos seguir aplicando todo lo aprendido para glorificar el nombre de nuestro gran Señor y Salvador Jesús.
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