En el año 1977, Carlos E. Restrepo retorna a Colombia desde los Estados Unidos después de haber conocido el evangelio de nuestro Señor Jesucristo y como miembro de la iglesia de Cristo Universal. Acompañado de los hermanos Wayne Partain y Royce Chandler (miembros de iglesias locales en Estados Unidos), realizan una serie de estudios bíblicos durante una semana, en casa de la Familia Restrepo Montoya, sembrando la semilla del evangelio a esta familia, a primos de los Restrepo y vecinos.   Este fue el primer acercamiento a la Palabra de Dios en Manizales, donde se hizo evidente el poder de las palabras de Pablo expresadas en:

1 Corintios 3:6-9  “⁶ Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios. ⁷ Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento. ⁸ Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor. ⁹ Porque nosotros somos colaboradores de Dios, y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.

La semilla fue plantada, y el crecimiento lo dio Dios.  En el mes de Diciembre del 1979  retorna Carlos Restrepo a Manizales predicando nuevamente el evangelio a su familia y a otro grupo de personas deseosas de escuchar el mensaje de salvación; dos de sus hermanos menores, Jaime y Diana, en quienes fue sembrada la semilla dos años antes, toman la decisión de bautizarse y una tercera persona, Mariela, también acude a las aguas del bautismo.  Esto ocurre la primera semana de Enero de 1980.  El trabajo evangelístico fue continuado por el hermano Fernando Abad, proveniente de la ciudad de Bogotá, quien durante aproximadamente 2 meses apoya la labor de expansión del evangelio y establecimiento de esta iglesia local.

Ante la necesidad de una persona que se dedique a la predicación permanente uno de los miembros de iglesia de Cristo en la ciudad de Bogotá, Hernán Urdinola, es enviado para hacerse cargo de esta naciente obra en Manizales. 

Durante los siguientes 5 años, gracias a la obra excelente de evangelización del hermano Hernán, nuevas almas fueron convertidas; posteriormente se sumó el hermano Carlos Tibaquirá, venido en un periodo vacacional desde la ciudad de Nueva York, siendo oriundo de Manizales; el hermano Tibaquirá decide retornar definitivamente a Colombia para compartir el evangelio en apoyo al hermano Urdinola; otros más son bautizados en este inicio y muchos los siguen posteriormente.  Gracias a este trabajo mancomunado es que logran el contacto con Uriel Panesso e Ismary Polania, Henry Silva, Adriana Franco y otros, quienes después de estudiar con el hermano Hernán, deciden bautizarse y entran a forma parte de la iglesia local.

Después de 5 años de trabajo en Manizales, el hermano Hernán retorna a Bogotá, y la iglesia en Manizales recibe al hermano Gregory Braswell, quien trabaja con esta obra local por espacio de aproximadamente dos años.

Ante la partida del hermano Braswell, Jaime Restrepo, miembro de la iglesia en Manizales por aquel entonces, decide dedicarse a la obra de evangelización a tiempo completo, y durante los siguientes 36 años labora con esta congregación.  En el 2016 decide retirarse de su trabajo con esta iglesia y tambien retira su membresía. 

Fueron varias las casas y espacios pequeños en donde por los primeros años fueron acogidos los que se añadieron a la iglesia local, entre estos sitios están Villapilar, Chipre, Carrera 24 entre calles 24 y 25, calle 30 con carrera 27, y finalmente por un buen número de años (aproximadamente 35 años) ocupamos un espacio en la calle 32 carrera 21 esquina.

En el año 2018 ante el crecimiento de la obra nos trasladamos a un local más grande en la carrera 21 con calle 26, siendo el predicador desde el año 2017 el hermano Jorge Alvaro Sepulveda.  También se añadió al trabajo en esta obra el hermano Luis Felipe Torres Muñoz, proveniente de la iglesia de Cristo en Chinchiná.

A raíz de la pandemia del COVID 19 y ante la imposibilidad de reunirse presencialmente, este local de congregación fue entregado en el año 2020.  Sin embargo, cuando se dio el permiso gubernamental permitiendo nuevamente las reuniones eclesiásticas, tomamos en arriendo un excelente local en la carrera 22 con calle 26, donde actualmente nos reunimos, desde septiembre de 2020.

Producto de la predicación del evangelio, desde la iglesia local en Manizales se dio inicio a obras alrededor de la ciudad, entre ellas Neira, Chinchiná, Santa Rosa y Anserma.  También gracias a la obra de hermanos dispuestos y apoyados por la obra de Manizales se predicó el evangelio y se dio inicio a obras en Cali, Medellín, Buenaventura y la Costa Atlántica. 

Después de 40 años de existencia de esta iglesia local, por la gracia de Dios y el esfuerzo de hermanos dispuestos a servir al Señor, fueron nombrados dos ancianos o pastores Luis Felipe Torres Muñoz y Juan Bautista Cifuentes, quienes hasta el día de hoy velan y pastorean en medio de esta grey en Manizales.